Tuve la suerte de conocer a un notable educador, deportista, entrenador y dirigente de Costa Rica: Alfredo Cruz Bolaños (1918-2006). A este gran pionero del deporte, lo conocí a finales de los 70, cuando ya había culminado una brillante carrera de logros extraordinarios y gozaba de su merecida jubilación. A pesar de esto último, a don Alfredo le sobraba mucha energía y siguió activo durante varios años más. Justamente, por encargo de la primera dama de la República, doña Estrella Zeledón de Carazo, nos tocó trabajar juntos estrechamente en un Programa de Parques Recreativos para todo Costa Rica, cuando yo trabajaba en el Instituto Costarricense de Turismo (ICT).